Atracción
El tipo 1 y el tipo 7 se complementan en no pocos puntos.
El tipo 1 se siente atraído por la jovialidad, el entusiasmo, el optimismo, la adaptabilidad, la energía, la curiosidad insaciable, el anhelo de descubrir cosas nuevas y el sentido del disfrute del tipo 7.
Al tipo 7 le atraen el autocontrol, la consciencia, la integridad, la fiabilidad, el perfeccionismo, el deseo de mejorar su entorno, el sentido de la responsabilidad y la organización del tipo 1.
El tipo 7 ayuda al tipo 1 a relajarse un poco más y a ser a veces más espontáneo, mientras que el tipo 1 ayuda al tipo 7 a concentrarse más en sus proyectos.
Desafíos potenciales
En general, el tipo 7 prefiere improvisar cuando empieza algo, mientras que el tipo 1 prefiere que las cosas estén planificadas, lo que puede dar lugar a conflictos.
El tipo 1 puede aceptar mal el comportamiento del tipo 7, que quizás le parezca en ocasiones demasiado indisciplinado, egocéntrico y disperso. Los tipo 7 pueden tener tendencia a distraerse con facilidad.
Una cosa que puede volver loco al tipo 1 es que el tipo 7 se permita no respetar sus planes en común para hacer algo que le parezca más divertido.
El tipo 7 puede a veces sentirse demasiado controlado por el tipo 1, lo que puede desembocar en frustración.
Los "desafíos potenciales" surgen en una pareja de tipos de eneagrama principalmente cuando no están en armonía consigo mismos. Con comunicación, la inversión de cada persona en la relación y la comprensión mutua, estos desafíos pueden evitarse y resolverse perfectamente.