Atracción
Estos dos tipos tienen muchos puntos en común, así como diferencias importantes, lo que los hace muy complementarios. Valoran mucho la competencia, la productividad, la eficacia, el rendimiento: los dos se mueven por el deseo de ser los mejores en lo suyo y se ayudan mutuamente a avanzar. El tipo 3 puede ser más sensible a su reputación, mientras que el tipo 1 presta más atención a sus principios. El tipo 1 se fija más en los detalles mientras que para el tipo 3 lo esencial es alcanzar el resultado.
Se complementan en algunos puntos bastante importantes. El tipo 1 tiene un enfoque muy rígido y metódico, mientras que el tipo 3 es más flexible y utiliza mucho sus capacidades de adaptación. El tipo 3, que generalmente tiene una vida social muy activa, desarrolla por ese motivo a menudo la del tipo 1, mientras que el tipo 1 permite al tipo 3 tener una cierta estabilidad interpersonal en la intimidad.
Ninguno de los dos es particularmente sentimental y prefieren comunicar por medio de actividades compartidas y conversaciones relacionadas con sus objetivos, más que hablar de sus sentimientos íntimos o mantener conversaciones profundas y emocionales.
Los dos sienten la necesidad de conservar un cierto espacio personal en la relación y están encantados de concedérselo mutuamente.
Desafíos potenciales
En ocasiones el tipo 1 puede considerar al tipo 3 como demasiado inconsciente, inmoral, negligente respecto a los detalles, superficial, manipulador, frío y narcisista. Es posible que se siente repelido por la tendencia del tipo 3 a modificar completamente su apariencia pública en función de la situación con el fin de quedar siempre bien. El hecho de que el tipo 3 engañe frecuentemente a los demás con una imagen falsa puede hacer que el tipo 1 se vuelva desconfiado en lo que atañe a su relación.
El tipo 3 puede encontrar a veces al tipo 1 demasiado crítico y moralista respecto a su comportamiento y sentirse frustrado por ello. El tipo 3 necesita sentirse apreciado y admirado, mientras que el tipo 1 puede mostrarse muy rígido cuando detecta imperfecciones, en particular cuando algo va en contra de sus principios.
Puede que a los dos les cueste afrontar los problemas sentimentales y ambos son susceptibles de refugiarse en sus actividades profesionales en caso de conflicto emocional.
Los "desafíos potenciales" surgen en una pareja de tipos de eneagrama principalmente cuando no están en armonía consigo mismos. Con comunicación, la inversión de cada persona en la relación y la comprensión mutua, estos desafíos pueden evitarse y resolverse perfectamente.